El Segundo Juzgado de Familia de Santiago acogió la acción de filiación interpuesta a fin que se reconozca la filiación de ambas madres respecto de su hijo de seis años de edad. Rocío Muñoz y Susana Peña estuvieron cerca de dos años intentando que su hijo sea reconocido por el Estado de Chile, por eso iniciaron un proceso judicial para lograrlo, aunque reconocen que esta situación debe ser reconocida por la ley y para todas las parejas lesbomaternales.
De acuerdo al fallo y a la información publicada en el sitio de la Universidad de Chile, «el tribunal entiende que de manera indubitada existía una maternidad conjunta desarrollada por ambas madres, materializada en el reconocimiento de dicha maternidad en el seno familiar, en la interacción con entidades públicas como el colegio, el sistema de seguridad social y los empleadores de ambas madres».
El tribunal, por su parte, comparte que es una lástima que sea la vía judicial la que reconoce una situación «que en los hechos es evidente y que debería ser reconocida por ley, en atención al derecho del mismo niño a su identidad, derecho que se manifiesta en el reconocimiento de la familia que lo acoge».
Este fallo se suma al de otras parejas lesbomaternales que han iniciado la misma vía, mientras no exista en Chile una ley que reconozca la filiación para todas las familias. En esta oportunidad se logró el reconocimiento del vínculo filiativo de la madre no progenitora.
La acción fue tramitada y representada por la Clínica Especializada de Interés Público de la Universidad de Chile, en coordinación con la Clínica de Interés Público de la Universidad Diego Portales (UDP).
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